En Cuba se perfecciona el funcionamiento de un Banco de esperma para que las más de 102 mil parejas identificadas con problemas para tener hijos por infertilidad masculina puedan tener una opción viable.

Según declaraciones de Roberto Álvarez, jefe del Departamento Materno Infantil del Ministerio de Salud Pública (Minsap), "el banco se enriquece mediante la eyaculación voluntaria de donantes, luego de análisis pertinentes que demuestren su buena salud y posteriormente la criopreservación del esperma".

Como refiere la nota de Prensa Latina, "para garantizar el funcionamiento del banco de semen se necesita de la participación de hombres de hasta 30 años, sin infecciones de trasmisión sexual ni enfermedades genéticas transmisibles, adicciones o conductas sociales negativas".

Se trata de una colaboración voluntaria, (la publicación no refiere que los donantes reciban pagos como en otros países), un acto altruista que ayuda otros a convertirse en padres y al que colabora se le ofrece información sobre su condición médica reproductiva.

Álvarez explicó que "el procedimiento contempla un interrogatorio y examen físico de aptitud que incluye la realización de un espermograma, proceder que permite conocer los marcadores específicos de la fertilidad, como la cantidad total de semen, el recuento espermático, la morfología y movilidad de los espermatozoides, el PH, la viscosidad, entre otros factores".

En tanto detallan que "el proceder se realiza con la mayor confiabilidad, por lo cual la mujer receptora desconocerá el origen del semen, solo obtendrá información sobre la compatibilidad fenotípica, y el donante no tendrá idea cuál pareja fue beneficiada".

De acuerdo con el jefe del Departamento Materno Infantil: "tener un banco de semen es importante en el desarrollo del Programa de Atención a la Pareja Infértil, mediante el cual se lograron mil 155 embarazos en los primeros tres meses de este 2019, para sumar 739 más que en igual período del año pasado".

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