Este lunes, autoridades mexicanas informaron a los migrantes cubanos en Tapachula la suspensión del permiso de vuelo para llegar a la frontera sur con Estados Unidos.

Después de que cientos de personas procedentes de la isla exigieran una respuesta, funcionarios les comunicaron que el permiso no se les otorgará.

Según explicaron, los cubanos con parole humanitario podrán recibir ese permiso de vuelo, pero el resto tendrá que continuar su travesía por tierra.

Ante la noticia, los cubanos lamentaron el anuncio y aseguraron que de continuar el viaje por carretera pondrían su vida en riesgo y pidieron una solución.

El permiso de viaje se estaba otorgando con normalidad, sin embargo, esta semana han cambiado las disposiciones, de modo que los cubanos deberán avanzar hasta Ciudad de México para continuar con sus planes.

“La situación es caótica aquí”, dijo un cubano desde Tapachula al periodista Mario Pentón.

Desde esta mañana, cientos de cubanos reclamaban dicho permiso de vuelo.

“Los cubanos que nos encontramos aquí en Tapachula que estamos pidiendo permiso de vuelo y nos lo están negando”, se escucha decir a una mujer.

“Queremos respuesta”, gritaban bajo el intenso sol mientras esperaban una solución que les permitiera continuar su viaje y acercarse a Estados Unidos.

Asimismo, en el video se aprecian decenas de personas e incluso puede escucharse el llanto de niños pequeños.

La ola migratoria se mantiene y llega hasta México, país que ha recibido este año muy cerca de romper el récord de solicitudes de refugio.

Andrés Ramírez Silva, director de la Comisión Mexicana de Ayuda al Refugiado (COMAR) comentó que las solicitudes de asilo este año podrían llegar a las 150,000, cifra superior al récord de 129 mil de 2021.

Teniendo en cuenta cómo están la tendencia y los niveles y promedios mensuales de arribos, las autoridades mexicanas creen que romperán la marca y que van a recibir cerca de 150.000 solicitantes.

“La demanda ha sido tan grande que la COMAR ha pedido apoyo de la Guardia Nacional para garantizar la seguridad de sus operaciones en el sur de México tras varios conatos de violencia”, señaló Ramírez Silva.

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