Aumentan en un 145 % los delitos de robo y sacrificio de ganado mayor en Cuba: “No pasa nada”
Redacci�n de CubitaNOW ~ lunes 24 de abril de 2023
Los delitos de robo y sacrificio de ganado mayor en Cuba aumentaron en un 145 % durante 2022 con respecto al año anterior, de acuerdo con cifras oficiales reportadas por el Ministerio de Agricultura de la isla.
Tales números fueron publicados por el portal oficialista Cubadebate este lunes en un reporte donde llama la atención sobre el fenómeno en el país, cómo afecta a los campesinos y las deficiencias de las autoridades para actuar al respecto, a pesar de la aguda crisis de alimentos.
Según las cifras oficiales, en 2022 el hurto y sacrificio de ganado mayor ascendió a 82 445 (45 315 reses y 37 130 equinos), una cantidad muy superior a la de 2021, cuando se reportaron 33 690 delitos de esa índole (con 17 144 reses y 16 546 equinos perdidos).
Los hechos de 2022 suponen “5 000 toneladas de carne deshuesada”. El director de Ganadería del Ministerio de la Agricultura, Adrián Gutiérrez Velázquez, dijo que los números tendrán impacto “en el futuro” en cuanto a la masa ganadera.
Las provincias que más hurtos registraron el pasado año fueron Villa Clara, con 12 243, Holguín (9825), Matanzas (8158), Cienfuegos (7082) y Las Tunas (6354). En Villa Clara, los municipios más afectados fueron Manicaragua y Camajuaní, con 1825 y 1744 delitos, respectivamente.
El jefe del departamento de análisis de la dirección de Registro Pecuario, Guillermo Enriquez, subrayó que Villa Clara y Holguín son dos de las provincias que históricamente han incidido negativamente en estos hechos.
“La provincia con las cifras más altas por lo general es Holguín. Siempre es importante guiarse por el índice porque son los que revelan las cifras contra la masa en cada provincia”, explicó. “Villa Clara con esos 12 000 es una barbaridad realmente, tratándose de una provincia de municipios pequeños. De los diez municipios más afectados 5 son de Villa Clara”, comentó.
Varios campesinos explicaron las dificultades que atraviesan ante el alarmante crecimiento de los delitos. “Me quedé con pocas cabezas, para poder controlarlas mejor. Ahora duermen al lado de la casa y a eso de las cuatro o cinco de la tarde las estoy recogiendo del potrero”, dijo uno.
“Invertí cerca de 20 y pico mil pesos comprando alambre y postes para echar la cerca que cubriera todo límites de la finca. Al final fue un dinero que perdí, porque todas las semanas me la picaban dos y tres veces para pasar los animales que robaban a cualquiera de los vecinos”, expuso.
“Si me llevan la yunta de bueyes, me retiro”, aseguró un anciano de 67 años. “Vienen y te los roban descaradamente, en tu propia cara. A mí me llevaron una vaca del terreno y ni rastro pude seguir. Llamé a la policía y nunca aparecieron. Yo fui hasta la estación para buscar el cintillo que te dan y poder darle baja al animal en el registro pecuaria y fue todo un peloteo. Estuve como cuatro veces y nada, casi se me vence el plazo y entonces hasta una multa uno tiene que pagar si eso pasa”, dijo.
“La policía no le está poniendo toda la atención que este tema necesita”, afirmó. Por otra parte, un directivo comentó que los policías carecen de recursos para esclarecer los delitos e inculpar a los responsables. “Hay que tomar huellas, ver los rastros de sangre en los cuchillos y en la ropa que coincidan con los del animal sacrificado, igual que la carne. Estos son procedimientos que sí ayudarían a condenar a los ladrones, pero no siempre se hacen”, apuntó.
Otra dificultad es que los robos están asociados a la violencia y los campesinos corren riegos de sufrir agresiones que pueden ser letales. “Se me han dado casos de guardias de las unidades que han sido agredidos por los ladrones. Muchos de los custodios han pedido la renuncia, porque tienen miedo de la agresividad de los ladrones”, admitió el propio directivo.