Otra Navidad y un muy cercano fin de año llenos de alegría junto a su familia, celebra el actor Armando Tomey, quien compartió en sus redes la inmensa felicidad de poder estar con los suyos, rodeado de bendiciones y cariño familiar en estas fechas tan especiales.

En su muro se ve cómo se emociona por cada momento vivido en familia, con mensajes llenos de amor y buenas vibras de quienes lo siguen y aprecian.

Armando Tomey es un actor cubano muy querido, conocido por sus interpretaciones en la Televisión de Cuba, especialmente por su papel como Antonio Fresneda en la emblemática telenovela Sol de Batey, que lo consagró como uno de los rostros más recordados de la pantalla chica cubana. A lo largo de su carrera en la Isla también participó en otras producciones para televisión como Pasión y Prejuicio, El Naranjo del Patio y la exitosa telenovela La Cara Oculta de la Luna y su magistral papel como Beatón, homosexual que marcó un hito en la puesta televisiva.

También incursionó en el cine con Kangamba y en teatro con obras como Andoba y La emboscada, consolidándose como un actor versátil y apreciado por el público.

Aunque su popularidad en Cuba fue grande, Armando Tomey decidió emigrar a Estados Unidos en 2013 junto a su esposa Raysa Ramos y sus hijos en busca de mejores oportunidades y una vida más digna para su familia. En entrevistas ha relatado que en Cuba “vivía para sobrevivir, no para prosperar”, enfrentando limitaciones económicas y profesionales que lo llevaron a tomar la difícil decisión de salir de su país natal.

Desde su llegada al sur de la Florida, ha tenido que reinventarse trabajando en diversas ocupaciones mientras mantiene viva su pasión por la actuación y el arte. Ha participado en obras de teatro en Miami como Las Lloronas, combinando trabajos como conductor con su amor por las artes escénicas. Lo más importante es que ha encontrado estabilidad y una calidad de vida que antes le era difícil alcanzar.

Además de su carrera actoral, Armando también ha explorado otras facetas artísticas y creativas. Comparte con orgullo en redes algunas de sus obras personales, incluidas esculturas que reflejan su amor por la creación y el sentido espiritual que impregna su vida diaria.

Hoy vive en Estados Unidos rodeado de su familia, donde celebra momentos únicos como los nacimientos de nietos —por ejemplo, la llegada de su nieta Arya— y participa activamente en la vida de sus seres más cercanos, compartiendo con emoción cada nuevo capítulo de su historia personal y familiar.

Fuentes: Todo Cuba, Cuballama

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