Una cubana de 60 años, víctima de un organizado robo en la ciudad de Pinar del Río, contó cómo sucedieron los hechos, cuando le robaron una cadena de oro de 10 quilates y unas sortijas, cerca del policlínico Turcios Lima.

En declaraciones a la prensa oficialista local, comentó que no tenía claro si había sido víctima de un asalto o de una estafa. “No te dan tiempo a pensar. Yo iba como a las 9:30 a.m. por el frente de la Catedral, por ahí por Maceo. Delante, muy cerquita, iba una muchacha que se agacha de pronto, casi tropiezo con ella”, refirió.

La muchacha le dijo que se había encontrado una bolsa con prendas y que se alejarían de la gente para compartirlas. “Caminamos hasta el portal del Turcios Lima y de pronto pasa el joven: ´Compro cualquier pedacito de oro´, nada, que estaban juntos”, recordó.

“Me dijeron ´te voy a dar estos anillos que valen más que tu cadena´. Casi me arrancó las sortijas que yo traía puestas, así, de forma brusca, no te dan tiempo a pensar y me pidió la cadena. Era finita, de oro de 10 quilates. Un regalo de mi hijo. La llevaba puesta hacía 20 años. Todo fue muy rápido”, lamentó.

“Me enredaron, yo no tenía que haber caminado detrás de ella y cuando me di cuenta de que había algo raro, él se me acercó y me dijo bajito al oído, `te la quitas o te la quito` y yo puse el cuello para que abriera el cierre de la cadena”, agregó.

El periódico estatal Guerrillero reconoce el “pánico” en la población pinareña ante el aumento de delitos en el territorio y admite que no es infundado, pues algunos han sufrido incluso lesiones graves a causa de los asaltos, como el ciudadano que resultó apedreado.

También llamó la atención sobre la falta de alumbrado en las calles, un problema que existía de antes, pero que se agravó tras el paso del huracán Ian por el territorio. “Aunque puede parecer simplista culpar a la oscuridad de los hechos de vandalismo recientes, no es menos cierto que ello facilita el trabajo a delincuentes y malhechores”, señala un reporte este viernes.

De igual modo, subrayó cómo las inquietudes han provocado que varios jóvenes en repartos como La Flora, Cuba Libre y Hermanos Cruz salgan a las calles armados con bates o machetes, para protegerse de un posible asalto.  

Al respecto, advierte que el artículo 279 del Código Penal recoge como delito la portación de armas contundentes y su portación, teniendo en cuenta los propósitos o motivos, lo cual incluye la posibilidad de utilizarlas contra cualquier persona.

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