El mercado informal de divisas en Cuba se ha mantenido estático en las últimas 24 horas, sin registrar cambios significativos en las tasas de cambio. Según el monitoreo independiente de elTOQUE, este viernes 20 de junio de 2025, el dólar estadounidense continúa vendiéndose a un promedio de 378 pesos cubanos (CUP), mientras el euro se mantiene en 410 CUP y la Moneda Libremente Convertible (MLC) se cotiza en 260 CUP.
La mediana de compraventa tampoco varió: el dólar sigue en 380 CUP y el euro, pese a una leve caída, se conserva en 410.
"La estabilidad en los precios del mercado negro es engañosa", alertan economistas, ya que detrás de la aparente calma hay una creciente presión de demanda insatisfecha y falta de divisas físicas en circulación." El propio Observatorio de Monedas y Finanzas de Cuba (OMFi) anticipó que durante la segunda mitad de junio habría un repunte en la volatilidad del mercado, impulsado por un exceso de demanda.
Las proyecciones del OMFi ubican al dólar en un valor central de 385 CUP para fin de mes, con un posible máximo de 408 CUP, mientras el euro podría alcanzar los 421 CUP. El MLC, por su parte, tendría un valor central de 274 CUP, con un techo estimado de 284 CUP.
Estas estimaciones alertan sobre una inminente subida que impactaría en el costo de vida, especialmente para quienes dependen de remesas y compran productos en tiendas en MLC o en el mercado informal.
En paralelo, el gobierno cubano ha puesto en pausa su anunciada reforma cambiaria, que prometía introducir una tasa flotante única. Durante el más reciente Congreso de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores (ANEC), el ministro de Economía, Joaquín Alonso, admitió que aunque se estudian alternativas, las condiciones actuales no permiten avanzar sin asumir riesgos que podrían “disparar la tasa de cambio”.
"La fragmentación cambiaria, con tres tipos de cambio distintos —oficial, bancario e informal— se ha convertido en un reflejo de las profundas distorsiones estructurales del modelo económico cubano", señalan expertos como Pavel Vidal y Mauricio de Miranda."
Ambos coinciden en que sin la participación activa del sector privado y sin medidas reales para liberar el control estatal sobre el sistema monetario, cualquier intento de reforma será ineficaz.
La situación actual, donde coexisten tasas tan dispares como 24 CUP para empresas estatales, 120 CUP en el sistema bancario y más de 370 en el mercado negro, está alimentando la desigualdad económica y dejando a la mayoría de los ciudadanos fuera de acceso a divisas por canales oficiales. La incertidumbre continúa marcando el pulso de la economía cubana.
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