Al cumplirse tres años de las protestas del 11 de julio de 2021, se revelan nuevas imágenes que muestran la detención y brutal represión contra Luis Frómeta Compte, un ciudadano alemán encarcelado en Cuba. Este caso, expuesto por la ONG Prisoners Defenders y publicado en Infobae, destaca la grave situación de derechos humanos en la isla y la impunidad con la que actúan las autoridades cubanas.
El video recientemente publicado muestra a Luis Frómeta Compte, rogando a los policías que no lancen piedras mientras es arrestado por grabar las protestas en La Güinera. En las imágenes se observa cómo los agentes actúan con violencia desmedida, reprimiendo a los manifestantes pacíficos. “Policías, no tiren piedras por favor”, se escucha decir a Frómeta mientras huye de la brutalidad policial.
Este material, encontrado en el teléfono de sus hijas en Alemania, evidencia la represión injustificada de las autoridades cubanas. Según la ONG Prisoners Defenders, Luis dialogó pacíficamente con los oficiales, quienes continuaron con su violencia, resultando en la muerte del joven Diubis Laurencio Tejeda a manos del subteniente Yoennis Pelegrín Hernández.
Luis Frómeta Compte, de origen cubano pero residente en Alemania por más de 40 años, fue condenado a 15 años de prisión por documentar las protestas. A pesar de los mandatos de Naciones Unidas que acusaron a Cuba de violar el debido proceso y el dictamen de liberación inmediata por parte del Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de la ONU, el gobierno alemán no ha logrado su liberación.
Frómeta ha sido sometido a torturas y maltratos en la prisión de máxima seguridad Combinado del Este en La Habana, poniendo en grave peligro su vida. A sus 61 años, enfrenta una condena que parece destinada a hacerlo morir en prisión, una situación denunciada por la ONG como “propia de un gobierno criminal”.
Prisoners Defenders ha criticado duramente la falta de acción del gobierno alemán y la Comisión Europea, quienes, a pesar de los dictámenes y pruebas, no han catalogado al régimen cubano como criminal. Esta inacción permite que las violaciones de derechos humanos continúen impunes.
Además, la Unión Europea y Alemania no han denunciado la violación del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación con Cuba, que estipula el respeto irrestricto a los derechos humanos. Esta falta de acción contrasta con la continua represión en Cuba y su apoyo explícito a la guerra en Ucrania.
El caso de Luis Frómeta Compte es un claro ejemplo de la represión y violaciones de derechos humanos en Cuba. La falta de respuesta efectiva por parte de la comunidad internacional, especialmente de Alemania y la Unión Europea, perpetúa la impunidad del régimen cubano. Es crucial que se tomen medidas firmes para exigir la liberación de todos los presos políticos y el respeto a los derechos fundamentales en la isla.