Cinco presuntos integrantes de la temida banda criminal venezolana Tren de Aragua fueron arrestados en Florida en relación con una serie de robos a tiendas minoristas que suman más de 30 mil dólares en pérdidas. Uno de ellos, identificado como Ramón Jesús Carpintero-Luna, protagonizó una escena que ha dado de qué hablar: rompió en llanto mientras era interrogado por las autoridades, incluso llegó a arrodillarse clamando por su libertad.
Los detenidos son Alexis José Rodríguez-Benavides (27), Darwins Smith Vásquez-León (28), Ildemaro Miguel Escalona Mendoza (26), Ramón Jesús Carpintero-Luna (26) y Samuel Oglis David Anthony Charlie (25). Todos ellos habrían ingresado ilegalmente a Estados Unidos por la frontera sur, según informó el sheriff del condado de Polk, Grady Judd, durante una rueda de prensa.
"Este es el fin del camino para ellos. Ya no podrán seguir robando licor de alta gama ni aterrorizando a la gente", declaró Judd, al presentar la imagen de Carpintero-Luna llorando durante el interrogatorio. "¿Llora porque ya no puede robarle a los estadounidenses? ¿Porque se acabó su vida delictiva? Quizás esté imaginando las cárceles de El Salvador en su futuro", ironizó el sheriff.
La investigación, iniciada en octubre pasado, se activó tras una serie de robos de botellas de licor costosas reportadas por cadenas como Publix, Walmart y Sam’s Club en el centro de Florida. El incidente clave que permitió identificar a los sospechosos ocurrió el mes pasado en un Sam’s Club de Lakeland, donde intentaron sustraer un carrito lleno de botellas valoradas en 3,200 dólares.
En total, los investigadores atribuyen a los sospechosos 32 robos y un hurto en el condado de Polk. Dos de ellos ya se encontraban bajo custodia por otro robo en el condado de Osceola cuando fueron identificados como parte del grupo. Los otros tres fueron capturados días después.
Las autoridades ahora buscan elevar los cargos a crimen organizado, además de los de hurto y robo al por menor, y no descartan que estos individuos formen parte de una red criminal más amplia operando en la región. La participación de extranjeros ilegales en este tipo de delitos ha intensificado el discurso de figuras como el sheriff Judd, quien criticó duramente la política migratoria federal, asegurando que “bandas violentas como el Tren de Aragua están vivas y activas en Florida Central”.
Los cinco arrestados enfrentan procesos judiciales y posibles cargos adicionales debido a su estatus migratorio irregular. Mientras tanto, el caso ha generado preocupación entre comerciantes y residentes locales, al tiempo que reabre el debate sobre los riesgos de seguridad vinculados a la crisis migratoria en Estados Unidos.
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