Alrededor de 461 derrumbes, 495 postes caídos con más de 100 transformadores fuera de servicio y afectaciones en la infraestructura del gas es el saldo preliminar dejado por Rafael por la capital cubana, que sin antes estaba en estado deplorable...¡imaginen ahora! Según autoridades de la provincia, las labores de recuperación incluyen la recogida de desechos ¿¿¿??? ¿ahora? (tuvo que venir un ciclón para hacer esa necesaria y obligatoriamente periódica función) y el reinicio de las operaciones en el aeropuerto internacional José Martí, así como de otras terminales aéreas, entre ellas, la de Varadero en la provincia de Matanzas.

Las afectaciones más visibles corresponden a la caída de árboles y la gran cantidad de escombros de los derrumbes totales y parciales sobre las infraestructuras eléctricas y de comunicaciones. 

“La Habana ha quedado fuertemente impactada, hoy estamos contabilizando más de 461 derrumbes totales y parciales (por cubiertas ligeras, caídas de paredes y escaleras). Debemos destacar que las afectaciones hubieran sido mayores si a tiempo no hubiésemos protegidos a un grupo de personas que viven en lugares que iban a ser fuertemente impactados”, dijo una funcionaria de La Habana.

Según el Estado Mayor de la Defensa Civil fueron evacuadas 218 mil 300 personas en el país y afortunadamente no se reportan fallecidos. Los representantes del régimen refirieron, además, que trabajan en restablecer el servicio eléctrico, pero justificaron que es “una tarea difícil sobre todo por los tendidos eléctricos caídos”.

El huracán Rafael, de categoría tres en la escala Saffir-Simpson, impactó con fuerza el occidente de Cuba, donde provocó graves afectaciones en viviendas, infraestructuras y agricultura, según reconoció el Gobierno cubano en su primera evaluación de daños. El ciclón tocó tierra a las 4:20 p.m. de este miércoles por la costa sur de la provincia de Artemisa y abandonó el territorio nacional, más de dos horas después por la costa norte de Pinar del Río.

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