La Aduana General de Cuba ha intensificado sus controles en los puntos de salida del país, tras registrar un aumento en los intentos de sacar divisas sin autorización. En los últimos meses, se han detenido a varios viajeros que intentaban trasladar cantidades superiores a los 5,000 dólares, euros o su equivalente en otras monedas, violando las regulaciones impuestas por el Banco Central de Cuba (BCC).

William Pérez, vicejefe primero de la Aduana, utilizó la red social X para informar sobre el incremento de casos relacionados con el tráfico ilegal de divisas. Según Pérez, "se han detectado intentos de extraer dinero de forma oculta y mediante diferentes métodos que buscan eludir las normativas establecidas por el BCC."

Las autoridades aduaneras han difundido imágenes que muestran los montos confiscados a aquellos que intentaron sacar cantidades no permitidas. Estas acciones forman parte de una estrategia más amplia para frenar el tráfico de divisas, un problema que ha cobrado relevancia debido a la situación económica del país y la escasez de moneda extranjera.

Este reforzamiento de los controles se produce poco después de que el diario oficial Granma publicara una advertencia clara: cualquier intento de comerciar divisas fuera del control estatal será considerado un delito. Las penas por la venta ilegal de divisas pueden llegar a ser de hasta cinco años de prisión o multas de entre 500 y 1,000 cuotas.

Uno de los casos más destacados de presunto tráfico de divisas ocurrió en febrero, cuando una mujer cubanoamericana fue detenida en el aeropuerto de Tampa con 100,000 dólares que había traído desde La Habana. La investigación reveló que la mujer mencionó varias veces el nombre del exministro de Economía, Alejandro Gil, quien había sido destituido bajo acusaciones de corrupción y, según reportes, se encuentra detenido.

Recomendado para ti