Acosadores irrumpen en albergues femeninos de la Lenin y desatan pánico
Redacción de CubitaNOW ~ miércoles 3 de diciembre de 2025
Padres, estudiantes y residentes de La Habana han encendido las alarmas tras una serie de denuncias que describen graves fallos de seguridad dentro de la Escuela Vocacional “V.I. Lenin”, uno de los principales centros de enseñanza preuniversitaria del país.
La información fue divulgada originalmente por el perfil de Nio Reportando un Crimen, donde varias familias expresaron temor, indignación y frustración ante lo sucedido.
Según el testimonio de una madre que prefirió mantener el anonimato por temor a represalias, un grupo de hombres habría llegado hasta los alrededores de los albergues femeninos.
Testigos relataron que algunos intentaron ingresar a varios cubículos.
En uno de los casos más alarmantes, un individuo consiguió empujar una ventana deteriorada y alcanzó a introducir medio cuerpo dentro del dormitorio, llegando incluso a tocar el cabello de una estudiante que dormía.
Esto desató una ola de gritos y pánico entre las jóvenes, que corrieron por los pasillos buscando ayuda.
Sin embargo, de acuerdo con las denuncias, la respuesta interna habría sido lenta o inexistente.
Algunas estudiantes llamaron a profesores de guardia, pero no recibieron asistencia inmediata. A esto se suma una práctica interna que genera más inquietud: los albergues femeninos permanecen cerrados con candado después de las 10 de la noche, lo que limita las posibilidades de evacuación o búsqueda de auxilio.
Ante la ausencia de acción oficial, estudiantes de 12mo grado salieron por su cuenta para intentar proteger a las niñas hasta que llegara apoyo.
Fue un padre militar quien, al enterarse de la situación, decidió llamar directamente a la policía. Según los reportes difundidos por Nio, las autoridades lograron detener a dos o tres de los intrusos, aunque el resto escapó.
Las denuncias también exponen múltiples deficiencias estructurales dentro del centro:
Ventanas rotas y con huecos que permiten accesos externos.
Carencia de vigilancia nocturna efectiva.
Fallos eléctricos que afectan el suministro de agua.
Alimentación insuficiente y, en ocasiones, en mal estado.
Conflictos entre estudiantes, como un reciente caso en el que un alumno lanzó agua caliente a otro, provocándole quemaduras.
Las familias afirman sentirse desamparadas y reclaman que la dirección del centro no ha adoptado medidas contundentes para garantizar la seguridad de los más de mil estudiantes que viven allí.
“Las familias están lejos, no pueden proteger a sus hijos. Solo pedimos soluciones antes de que ocurra una tragedia mayor”, expresó una madre afectada.