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Abuela de Caibarién exterioriza su sentir con impactantes palabras: '¡comida y salud!´

Redacción de CubitaNOW ~ domingo 21 de septiembre de 2025

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Una publicación desde Caibarién ha conmovido las redes sociales por el grito de impotencia de una abuela, cuyas palabras son pronunciadas por millones de cubanos que sienten día a día el abandono total de un país que prometió justicia social y hoy solo reparte miseria.

Esta señora, con dolor y dignidad, resumió la tragedia nacional en la que los abuelos no tienen qué comer después de haberlo dado todo, los niños se van a la escuela sin merienda ni desayuno, las embarazadas no tienen futuro para sus bebés y los enfermos carecen de medicinas.

Al preguntársele qué quería contestó: "comida y salud"

Lo que dijo no es un caso aislado. Es la radiografía de una nación donde la vejez se castiga con el hambre. Muchos jubilados reciben pensiones que apenas alcanzan para un cartón de huevos o un poco de arroz al mes. Quienes levantaron fábricas, construyeron escuelas, trabajaron en el campo o lucharon en guerras internacionales, hoy terminan haciendo colas infinitas por un pedazo de pan o sobreviviendo gracias a la caridad de vecinos y familiares en el extranjero.

A esto se suma la infancia robada. Los niños, que deberían crecer fuertes y alegres, asisten a las aulas con estómagos vacíos y mochilas sin meriendas. En un país que alguna vez se enorgulleció de sus campañas educativas, hoy los maestros ven cómo sus alumnos se desmayan por falta de alimentos.

La desesperanza también golpea a las embarazadas. Tener un hijo en Cuba ya no es motivo de ilusión, sino de angustia. ¿Cómo alimentar a un bebé en un país donde no hay leche, ni compotas, ni pañales? Muchas mujeres optan por no traer hijos al mundo, conscientes de que no tendrán ni lo básico para criarlos.

Y, como si fuera poco, los enfermos enfrentan un calvario. Las farmacias están vacías, los hospitales sin recursos y los pacientes dependen de inventos caseros o de lo que logren conseguir en el mercado negro.

Desde el anciano hipertenso hasta el niño asmático, todos pagan con sufrimiento la corrupción y el desastre de un sistema que hace tiempo dejó de preocuparse por la vida humana.

Las palabras de esta mujer en Caibarién tienen eco de todo un país. Un grito de dolor que se repite en cada pueblo y ciudad de Cuba. Y aunque el régimen intente silenciarlo, la verdad se multiplica: Cuba está de luto, y lo está porque le han arrebatado el futuro, el presente y hasta la dignidad a su pueblo.




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