La mediana empresa privada Y. Ferreira, con casi cinco años de experiencia en la importación y comercialización de alimentos y artículos para el hogar, se prepara para inaugurar una nueva tienda especializada en productos de ferretería en la ciudad de Santa Clara, con la particularidad de ofrecer servicio las 24 horas.

El objetivo, según explicó la compañía, es atender emergencias domésticas o de negocios en cualquier momento del día. De acuerdo con un reporte de la Agencia Cubana de Noticias, el establecimiento estará ubicado frente al parque Antonio Maceo, en un inmueble que anteriormente funcionó como lavandería estatal y que fue arrendado al Estado.

La rehabilitación del local ha requerido una inversión superior a 12 millones de pesos cubanos (CUP), lo que genera preocupación sobre el impacto que estos costos puedan tener en los precios finales. Norge Lugones Martín, administrador de Y. Ferreira, declaró que además de ferretería, la tienda incluirá productos de aseo, alimentos y otros artículos de alta demanda.

El emprendedor precisó que todos los precios se manejarán en CUP y se habilitarán pasarelas electrónicas para facilitar el pago. Los trabajos constructivos comenzaron hace seis meses y se encuentran al 80% de ejecución, con la participación de cuatro empresas privadas locales encargadas de reparar pisos, techos y sistemas de seguridad. La inauguración está prevista antes de que concluya el año.

La nueva tienda generará alrededor de 10 empleos directos, principalmente en áreas de seguridad y protección.

El proyecto se enmarca en el contexto de las Mipymes privadas, autorizadas en Cuba desde septiembre de 2021 mediante el Decreto-Ley 46. A marzo de 2025, la ONEI reportaba 9.550 Mipymes en funcionamiento. Desde 2023, estas entidades pueden importar directamente bienes relacionados con su actividad, siempre que cumplan con requisitos legales y fiscales.

Sin embargo, los emprendedores enfrentan altos impuestos —35% sobre utilidades, 10% sobre ventas, 5% por fuerza laboral, 14% de seguridad social y 1% a gobiernos locales— y desventajas frente a las empresas estatales. Mientras las privadas deben adquirir dólares en el mercado informal a tasas de 420-440 CUP/USD, las estatales acceden a la tasa oficial de 120 CUP/USD a través de bancos y conglomerados como GAESA, lo que encarece hasta 20 veces las importaciones privadas.

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