Leandro Medina Fellové, conocido en el mundo musical como Insurrecto, el rapero cubano que ha ganado reconocimiento por su estilo crítico y su compromiso social, denunció públicamente las condiciones extremas en las que se encuentra recluido en el centro migratorio Alligator Alcatraz, en Florida. El artista permanece bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE), a la espera de un proceso de deportación.

Desde su perfil de Facebook, Insurrecto relató la dura realidad dentro del centro de detención, señalando frío extremo, insalubridad, hacinamiento y maltrato por parte de algunos miembros del personal. Además, denunció la falta de atención médica adecuada, una situación crítica considerando la vulnerabilidad de los internos y los riesgos de salud que representa la sobrepoblación y las condiciones higiénicas deficientes. Según el músico, las instalaciones no cumplen con los estándares mínimos de cuidado humanitario, y los detenidos enfrentan situaciones que afectan tanto su bienestar físico como emocional.

Insurrecto es un rapero cubano que se ha destacado por su música con contenido social y político, abordando temáticas que reflejan la realidad de los cubanos tanto dentro como fuera de la isla. Su activismo artístico y su voz crítica lo han llevado a tener repercusión internacional. Aún así Insurrecto se halla detenido mientras enfrenta procesos migratorios.

El centro Alligator Alcatraz, donde se encuentra recluido, forma parte de la red de instalaciones administradas por ICE en Estados Unidos, destinadas a retener a personas en espera de deportación o resolución de sus casos migratorios. Sin embargo, denuncias de organizaciones de derechos humanos y de los propios internos han señalado repetidamente problemas como hacinamiento, deficiencias en alimentación y atención médica limitada, así como trato hostil por parte de algunos empleados.

La denuncia de Insurrecto se suma a otras voces que buscan visibilizar las condiciones de los centros de detención migratoria en Estados Unidos, y resalta los desafíos y riesgos que enfrentan los migrantes, especialmente aquellos que provienen de países como Cuba y que ya han vivido situaciones de vulnerabilidad antes de llegar a la frontera norteamericana. Su testimonio ha generado preocupación en la comunidad artística y entre defensores de los derechos humanos, quienes demandan una revisión inmediata de las condiciones en Alligator Alcatraz y medidas para garantizar la seguridad y dignidad de los internos.

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