"Miren esto, ahora traigo al niño a este parque que está en la esquina del Hotel Presidente y dice este señor que el parque está cerrado porque es de una MIPYME. ¿En qué momento los parques pasaron al sector privado?", cuestionó este domingo un padre cubano en un grupo de Facebook.
"Ya ustedes saben, el niño se puso a llorar. Bueno, en resumen, le dije al custodio que me llame a la patrulla porque no me da la gana de que el niño llore porque él dice que el parque está cerrado, parque que hasta ahora siempre ha estado abierto a cualquier hora".
"Resulta ser que ya que pusieron unos quioscos de venta lo hacen privado. ¿A dónde vamos a parar que no puedas sacar a tu niño ni a un parque porque muchas opciones no tienen? Por no decir que ninguna".
Varios cubanos lamentaron la situación y vecinos de la zona del Vedado señalaron que hace meses pertenece a una MIPYME (micros, pequeñas y medianas empresas).
"Esa es la nueva, el Estado no está para mantener los parques y los está rentando. Se tienen que dejar como un objeto social, o sea, una o dos veces al mes hay que hacer actividades sociales gratis (cosa que nadie hace). No se puede cobrar entrada y hay que mantener distracción gratis como los aparatos de hierro, columpios, cachumbambe y otros aparatos que tenga el parque. Todo lo demás que ponga el que arrienda, hay que pagarlo. Además, les ponen horarios y los cierran para proteger sus cosas. Eso lo están haciendo en todos los parques. Te digo porque estoy bien empapada en el tema ya que consideré la idea de arrendar uno".
"Qué falta de respeto más grande. MIPYME ni MIPYME, eso es un parque público. Lo único que le queda a la gente es sentarse con los niños en el malecón y ahorita ni eso"; "es verdad, tengo una amistad que tiene un parque también. Vamos para el capitalismo con salarios de socialismo. El presente de nuestros hijos es triste y el futuro será mucho peor" y "ya uno no sabe dónde está, pero sí sabe adonde vamos a parar", comentaron cubanos.
"Yo vivo cerca de ese parque y entiendo lo que dices, pero hace meses una MIPYME lo cogió y arreglaron todo. No sé hace cuánto no venias ahí pero ese parque estaba casi en la ruina y ellos lo mantienen en buenas condiciones. Hacen muchísimas actividades y siempre muy buen ambiente. Yo me alegre que se lo dieran a ellos, ese lugar se prestaba para cualquier cosa: siempre con peste a orine, oscuro... Y no cobran la entrada, lo que sí tienen sus horarios".
"Ese parque hace muchísimas actividades para los pequeños con entrada totalmente gratis. Los kioskos donde venden alimentos imagino que recaudan los fondos para sustentarlo. Yo voy con mi pequeño con bastante frecuencia y el lugar es muy acogedor. Los parques de atracciones funcionan con horarios. Parques públicos, en plan banco y naturaleza, están abiertos las 24 horas. Pero hasta por una cuestión de seguridad es bueno que esté cerrado por las noches. Cualquier accidente por falta de visibilidad es un riesgo que se puede evitar tomando esas medidas. El muchacho solo está haciendo su trabajo. Si él no estuviera seguramente no estaría bien conservado el parque porque desgraciadamente a la gente le cuesta mucho cuidar lo que no es suyo".
"Pienso que también hay que entender que los parques tengan horarios. Y ese parque en específico no te cobran por estar: uno consume si quiere o no, no es obligatorio. Y tienen un proyecto cultural muy bonito, que dicho sea de paso, también es gratis. A día de hoy y como están las cosas entiendo que tengan horarios y custodio para preservar parte de su inversión, pero eso no es solo en Cuba. En todos los países se hace así".
"Yo vivo en la parte del campo de Guanabacoa, aquí hay solo un parquecito con tres columpios viejos y una canal, pero era el entretenimiento de muchos niños sobre todo cuando salían de la escuela ya que queda cerca de ella. Resulta que hace varios meses se lo dieron a un particular que lo tiene cerrado desde entonces, y a nadie le interesa, en este país a los gobernantes no le interesa los problemas del pueblo ni mucho menos", lamentó una cubana.
Nuestro medio se reserva la identidad de los cubanos que opinaron sobre la privatización de los parques infantiles en La Habana.