Cuba sufre la peor crisis económica de los últimos 30 años y pese a las evidencias del fracaso, el régimen sigue empeñado en repetir los mismos errores y no desechar su "socialismo".
"Cómo enfrentamos la asfixia económica, ahí está el principal problema", dijo el presidente designado de Cuba, Miguel Díaz-Canel, en la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
"Lo que queremos hacer es salvando el socialismo, no vendiéndolo ni privatizándolo. Ahora tenemos privaciones y carencias, pero tenemos dignidad humana y seguridad para vivir", señaló.
Díaz-Canel insistió en que la prioridad es trabajar para buscar las mejores soluciones a ese problema. "Nuestro concepto de bienestar no puede estar en el consumismo, sino en las relaciones humanas como sociedad y pueblo".
El dirigente dijo que hay "ineficiencias empresariales que después se respaldan con el Presupuesto del Estado, generándose así afectaciones al gasto social. Llamó a "trabajar para lograr que exista un sistema productivo local robusto, lo cual permitirá poder fortalecer la Estrategia de Desarrollo Local en cada territorio".
Así mismo, dijo que es necesario "ir a un proceso de redimensionamiento empresarial en dos direcciones: subordinación de las empresas para lograr autonomía en los municipios y estructura empresarial, donde es necesario reducir aparato administrativo y burocrático. Al país no lo vamos a desarrollar si queremos aplicar las mismas cosas en todos los lugares, porque cada territorio tiene particularidades que deben ser tenidas en cuenta", señaló la cuenta oficialista Presidencia de Cuba en Twitter.
La ministra de Finanzas y Precios, Meisi Bolaños, utilizó en el encuentro la habitual excusa del régimen para todos los problemas en Cuba: culpar al embargo de los Estados Unidos.
Bolaños recordó al presentar la Liquidación del Presupuesto del Estado del año 2021 que el año pasado "estuvo marcado por el impacto de la Covid-19, la crisis multidimensional y un recrudecimiento sin precedentes del bloqueo estadounidense. A pesar de estas complejidades se mantuvo la vitalidad de los servicios básicos a la población".
La economía cubana tiene entre sus principales retos lograr la reducción del déficit presupuestario y el crecimiento de los ingresos. En 2021 se destinaron más de 17 mil millones de pesos al enfrentamiento de la Covid-19, de los cuales 3066 millones se emplearon en el proceso de vacunación a la población, con las vacunas propias.
Según la ministra, "el presupuesto de 2021 posibilitó respaldar acciones de transformación y atención a problemáticas sociales y materiales en 600 barrios, de 91 municipios del país, y se beneficiaron más de 175 mil personas".
Por su parte, Díaz-Canel insistió en consignas para paliar la crisis económica en Cuba. "Tenemos la convicción de que nosotros podemos, de que nosotros vencemos. Que nuestros niños crezcan felices, que se respete el derecho de todas las familias, que un problema pueda resolverse con la participación de todos, en la solidaridad, ahí debe radicar nuestro bienestar".
"Nos ha tocado vivir una etapa de una complejidad tremenda, pero de todos los problemas vamos a ir saliendo. Y lo haremos construyendo el socialismo y la Revolución", afirmó.
Díaz-Canel dijo que los representantes en Cuba se eligen por su honradez, decencia y disposición de trabajar para la gente. "Las acciones de nuestro Gobierno siempre están encaminadas a lograr más democracia y justicia social".
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