Los precios de los vehículos usados alcanzaron su nivel más bajo del año en mayo debido a la disminución de las ventas, el aumento de las tasas de interés y los precios minoristas inflados.
Según Cox Automotive, su índice de valor de vehículos usados de Manheim, que rastrea las ventas de vehículos en subastas de concesionarios mayoristas en los EEUU, cayó 2.7% de abril a mayo, aterrizando en 224.5, el nivel más bajo desde diciembre pasado cuando era 219.3.
Chris Frey, gerente de información económica y de la industria de Cox, señaló que "la tasa de disminución podría bajar en los próximos meses a medida que nos encontremos con los precios más bajos en las subastas de mayo a noviembre del año pasado". Se estima que las ventas minoristas de autos usados cayeron un 1% en mayo en comparación con el mismo período del año anterior.
Muchos consumidores, especialmente aquellos con calificaciones crediticias bajas, han sido excluidos del mercado, optando por reparar sus vehículos existentes en lugar de reemplazarlos. Esta caída en las ventas y los precios mayoristas sugiere un debilitamiento del mercado de vehículos usados, lo cual, según Cox, no es favorable para los concesionarios de automóviles del país, pero favorece los esfuerzos de la Reserva Federal para reducir la inflación a través de las tasas de interés más altas.
Los precios de los vehículos usados han funcionado como un barómetro de la inflación desde principios del año pasado, tras los picos de precios generados por la pandemia del coronavirus y los problemas de la cadena de suministro que interrumpieron la producción de vehículos nuevos.
Finalmente, a pesar de las caídas continuas que podrían ayudar a reducir los precios de los vehículos usados para los consumidores, los precios minoristas han aumentado un 0.8% en las últimas cuatro semanas. En abril, el precio promedio de cotización de un vehículo usado fue de $26,969, según Cox.