En Holguín se ha hecho viral en redes sociales la imagen de una mujer pidiendo ayuda económica y alimentos para su bebé en las inmediaciones de la terminal Las Baleares. La información fue recopilada y difundida por Guillermo Rodríguez Sánchez, quien realizó un seguimiento preliminar para determinar cómo se podía brindar apoyo a la menor y su familia.

Según la investigación de Rodríguez Sánchez y el testimonio de otras fuentes, incluida la opinión del influencer Noly Blak, el hecho constituye una cruel estafa con la utilización del niño para dar lástima.

La mujer estaría sometiendo al infante a condiciones desfavorables bajo la indicación de su esposo y un hermano, con el objetivo de generar lástima entre los transeúntes y recaudar dinero o bienes materiales que luego serían vendidos. También se indica que la madre actuaría de manera consciente en la exposición del menor.

El modus operandi consiste en que los adultos se ubiquen a unas cuadras de la terminal en una candonga mientras que el niño es expuesto con poca ropa, sucio o hambriento, buscando causar mayor impacto emocional. Una vez reunido el dinero, la familia se traslada a otros puntos de la ciudad para repetir la misma práctica.

Testigos y trabajadores de kioscos en la zona informan que las cantidades recaudadas pueden ascender a miles de pesos por jornada. Incluso se menciona la existencia de personas en el exterior que envían remesas a la familia bajo la impresión de que los fondos se destinan a la menor, mientras los bienes supuestamente adquiridos son posteriormente revendidos.

Durante estas actividades, el niño permanece expuesto a largos períodos de sol y deambula sin condiciones higiénicas adecuadas, consumiendo únicamente los alimentos que le entregan transeúntes, sin control sobre su procedencia ni valor nutricional. La madre, originaria del municipio Báguanos, se traslada casi a diario a la capital provincial para continuar con esta actividad.

Rodríguez Sánchez enfatiza que esta situación constituye un caso de posible maltrato infantil y hace un llamado a que las autoridades de Holguín, incluyendo la fiscalía, investiguen y determinen la responsabilidad de cada adulto involucrado. Es fundamental evaluar si se trata de coacción, negligencia o trastornos que puedan haber influido en las acciones de la madre, pero el principal afectado es el menor.

La denuncia busca visibilizar un patrón de explotación de niños que requiere atención inmediata, resaltando la necesidad de proteger a los menores frente a personas que lucran a costa de su vulnerabilidad.

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