Zenaida Romeu publicó un emotivo texto en sus redes sociales tras el fallecimiento den cantautor cubano Pablo Milanés, a quien le debe el impulso para iniciar el proyecto de la Camerata Romeu.
La artista contó que en 1992 había presentado al Instituto de la Música un proyecto de una orquesta femenina. "Con 10 años de graduada como directora de orquesta y de coros, quería tener mi propia orquesta femenina de cuerdas para trabajar todos los días con una orquesta propia y no solo por invitación", explicó.
No había dinero, las instituciones culturales de la isla no tenían capital para materializar su idea, pero justo en ese tiempo Pablo Milanés había creado su fundación.
Estando en España, "el manager cubano Rolando Montes de Oca me comunica que Pablo había creado una Fundación para ayudar a jóvenes que presentaran proyectos válidos y Montes me dice que había presentado el proyecto a mi nombre pues vio la posibilidad de concretarlo... A Pablo le gustó la idea y apostó por esa orquesta de mujeres para la música de conciertos, que después vi con orgullo que nuestro expediente tenía el numero 001. Es decir, era el primer proyecto aprobado!!", recordó.
"Así acogieron a Yoruba Adabo, a Coralina, a jóvenes trovadores como Gerardo Alfonso, Polito Ibañez, Raúl Torres, cantantes como Xiomara Laugart, músicos como Emiliano Salvador y otros muchos más que lamento no recordar. Pero a todos dotó de sus primeros discos, les organizó giras de conciertos. En realidad la Fundación nos impulsó a todos", agrega.
Zenaida explicó que a finales de ese mismo año la Fundación PM "desarrolló toda la logística para la creación de la Camerata Romeu: prensa plana, radial y televisiva para una convocatoria nacional de jóvenes violinistas femeninas y el 19 de febrero teníamos la selección. Nuestro primer concierto fue aplazado por un terrible accidente que sufrimos Beatriz Vázquez, y yo, quien fue la primera manager de la orquesta a quien se le dedicó nuestro primer concierto el 4 de septiembre de 1993 en el Teatro Nacional y tuvimos el honor que Pablo cantara con nosotras en el encore, con un arreglo especial de Andrés Alén. Así, el público de pié, pudo agradecerle su labor filantrópica en favor de aquel joven proyecto.
"Muchos artistas somos deudores de la generosidad y el compromiso con la cultura que Pablo pudo desarrollar a través de la Fundación. No fue mucho el tiempo que existió, pero dejó una huella bien marcada como una segunda opción que tuvimos los entonces jóvenes artistas", explica.
"Dicen los chinos que todos lo caminos empiezan con un primer paso. Ese primer paso para muchos artistas fue de la mano de un hombre bueno que puso su propio patrimonio personal en favor de los demás y cuyo nombre es Pablo Milanés. Que Descanse en Paz lleno de Música, Agradecimiento y Amor", concluye.