Los sobrevivientes a la tragedia en Bahía Honda aseguran que lo ocurrido este fin de semana fue un asesinato.
"Nos fueron arriba con todo, a matarnos. Ellos no tuvieron compasión ninguna. Todo el mundo les gritaba que había una embarazada y una niña y ellos respondieron que quién nos había mandado a montarnos, que por qué no pensamos las cosas antes de hacerlas", afirmó una joven embarazada al periodista Mario Pentón de América TeVé.
Según cuenta, inicialmente "los guardafronteras golpearon la lancha por atrás y neutralizaron los motores. Luego les dijeron que partitrían la lancha al medio "y así mismo fue".
"No tuvieron escrúpulos, esa fue la cosa más triste de la vida que pudieron hacer esas personas, no hubo necesidad de haber hecho eso, ya que estábamos parados en el puesto", explicó por su parte otro de los jóvenes que iba en la embarcación.
En sus declaraciones el joven aclaró que ellos mismos tuvieron que ayudarse unos a otros para subir porque estaban ahogándose en el mar.
"Nos partieron la lancha al medio. Los familiares fuimos rescatando a las personas nosotros mismos, y empezamos a subirlas poco a poco porque ellos ni siquiera nos ayudaron", denunció.
El pasado 29 de octubre una embarcación proveniente de Miami recogió a un grupo de 23 cubanos en las costas de Bahía Honda. Las tropas de Guardafronteras atacaron la lancha provocando la muerte de al menos siete personas, entre ellos una niña de dos años. Otra persona aún permanece desaparecida.
El Ministerio del Interior culpó al Gobierno de EE.UU y dijo que se trataba de una operación de tráfico humano.
El testimonio de las víctimas muestra que se trató de un crimen de lesa humanidad.
José García, el padre de Yerandy García Meizoso, uno de los fallecidos en la tragedia, afirmó que los guardafronteras ya "estaban esperando la lancha y le reventaron los tres motores".
"Se alejaron un poco y luego regresaron. "La partieron por la mitad y le pasaron por encima a todo el mundo. El médico de Bahía Honda le dijo a la hermana de mi chamaco que los habían matado instantáneamente", aseguró.
García aclaró que se trataba de una lancha que había ido a buscar una misma familia y a otros cuatro amigos cercanos que se sumaron.
La embarcación de los guardafronteras vino "recto para nosotros. Recto. A toda velocidad. A nosotros nos dio por el lado izquierdo… La partió, si yo vi los pedazos de lancha, y yo perdí el conocimiento del golpe que me di en la cabeza, y ahí fue cuando perdí a mi niña en los brazos, y la ola me tiraba para encima de un pedazo de la lancha", había dicho en declaraciones anteriores Diana Meizoso, la madre de la niña fallecida.
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