Houston se estremeció este domingo con un crimen que ha conmocionado tanto a la comunidad local como a los cubanos dentro y fuera de la isla. Ediesky Piñeiro, un cubano de 34 años, fue asesinado a quemarropa justo en la puerta de su casa, ubicada en la cuadra 11200 de Whittingham Lane. Según informes policiales y testimonios de testigos, el presunto responsable del crimen es Andrés Fernández De La Paz, de 36 años, quien ya fue arrestado.
Fernández De La Paz habría llegado hasta la vivienda donde se encontraba Piñeiro y, sin mediar palabras, le disparó a quemarropa. Testigos aseguran que el asesino es la expareja sentimental de la actual esposa de la víctima, quien estaba dentro de la casa en el momento del ataque, acompañada por dos niñas menores de edad. Afortunadamente, ni la mujer ni las niñas resultaron heridas.
Las cámaras de vigilancia captaron el momento exacto del disparo, dejando evidencia gráfica del crimen. Las imágenes se han compartido en redes sociales y generaron gran conmoción entre los usuarios. Una de las voces que se pronunció fue Irma Broek, opositora abierta al régimen cubano, quien denunció el hecho como una tragedia que refleja la violencia creciente que también afecta a la comunidad cubana en el exilio.
El caso aún está bajo investigación por parte de las autoridades locales, quienes no han revelado más detalles sobre los motivos que llevaron al ataque, aunque se presume que se trata de un crimen pasional.
La muerte de Ediesky Piñeiro ha dejado a una familia destrozada y ha levantado una nueva alerta sobre los casos de violencia doméstica y pasional que terminan en tragedia, incluso lejos de la isla, en ciudades donde muchos buscan una nueva vida lejos del conflicto.
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