Jancel Moreno, un joven youtuber y activista proderechos humanos, fue desalojado del departamento que arrendaba a un funcionario del régimen. Sin previo aviso el dueño del inmueble le dio apenas unas horas para que abandonara el recinto. 

El argumento del molesto “revolucionario” fue que sus principios no le permitían arrendar a personas contrarias a las políticas del régimen; aunque sus valores si le permiten “cobrar 100 usd de alquiler y al otro día decirte que te vayas”, apuntó Jancel.

Moreno expresó que fue tratado como un perro “por simplemente expresar sus ideas, por simplemente hacer el contenido que hago para las redes sociales”. El dueño del departamento se aprovecha de la inexistencia de disposición del gobierno para defender los derechos de los ciudadanos con criterios diferentes. 

Esta acción es una clara discriminación y una estafa, debido a que el comunista había cobrado el valor de este mes y cerró el contrato de palabra sin devolver el valor de los días que no usarían la propiedad. 

Jancel rehusó revelar el nombre del “revolucionario”, pero cuestionó su moral: “Qué clase de revolucionario no paga impuestos? (…) y luego “no puede aceptar ese tipo de contenido”, agregó Jancel, haciendo referencia a su trabajo de denuncia en las redes. La amoralidad y el oportunismo es lo común entre los defensores del régimen. 

“No soy el primero que le pasa, ni tristemente seré el último, mientras exista en Cuba todo lo que sabemos que hay, mientras en Cuba se discrimine a las personas por su opinión política”, expresó Jancel, en shock aún por lo ocurrido.

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