La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), expresó este miércoles su rechazo al nuevo código penal aprobado por el régimen de La Habana, con duras sanciones para limitar la liberta de expresión incluso a través de las redes sociales.

“El Código tiene elementos parecidos a pertrechos militares, que el régimen podrá usar para atacar y minar la información y las opiniones independientes de los disidentes. Los ciudadanos ni siquiera podrán usar con libertad las redes sociales ni convocar a sus amigos a protestar”, indicó la SIP en un comunicado.

Jorge Canahuati, presidente de la organización que tiene sus oficinas centrales en Estados Unidos, maniestó su consternación porque las “autoridades cubanas viajen al pasado, a contrapelo del mundo desarrollado, hacia épocas oscurantistas, cuando los funcionarios se distanciaban del pueblo a través de abusos y privilegios”.

El documento fue aprobado en La Habana el pasado domingo, 15 de mayo, por la Asamblea Nacional del Poder Popular. Además de mantener la pena de muerte para 24 delitos, incluye nuevas tipificaciones en cuanto a la sanción de cadena perpetua.

De igual modo, criminaliza el derecho a las libertades de prensa, asociación y reunión. El código penal surge a menos de un año de las históricas protestas antigubernamentales y masivas del 11 de julio de 2021, por las que actualmente cientos de cubanos se encuentran presos actualmente. Decenas de manifestantes han sido condenados a largas condenas de cárcel.

El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Carlos Jornet, dijo que tanto Cuba, como Nicaragua y Venezuela, aparecen en la mínima lista de países cuyos gobiernos contravienen la Convención Americana sobre Derechos Humanos, informa la Voz de América.

Anteriormente, el gobierno de Estados Unidos condenó el nuevo código penal a través de un mensaje compartido por su sede consular en La Habana. “Condenamos que el régimen haya aprobado ayer un nuevo código penal que restringe aún más la libertad de expresión, de prensa y de reunión en Cuba”, menciona el texto.

El presidente del Tribunal Supremo Popular (TSP), Rubén Remigio Ferro, aseguró que el texto legal “se distingue por mantener, con carácter excepcional, la posibilidad de imponer la sanción de muerte en 23 tipos penales de extrema gravedad, la cual desde 2003 no se aplica en Cuba y se conmutó a todas las personas que estaban pendientes. La pena de muerte se suprime en cuatro delitos y el nuevo Código Penal introduce como nuevas sanciones las de reclusión domiciliaria y servicio en beneficio de la comunidad”.

Sobre la privación perpetua de libertad, la revista independiente cubana El Toque apuntó que “de solo tres delitos que contemplaban su aplicación, en el anteproyecto ascendieron a 31 los delitos que pueden sancionarse con esa medida”.

“Un escenario como este termina por funcionar como una agravación solapada, sobre todo de los delitos contra la Seguridad del Estado que con anterioridad no contemplaban esa posibilidad. Por ejemplo, en el Código Penal vigente el delito de sabotaje –uno de los que se ha utilizado para juzgar y sancionar a manifestantes del 11 de julio de 2021– no reconoce la posibilidad de imponer la privación perpetua de libertad a sus autores”, advierte el referido medio.

“Las sanciones máximas contempladas para ese delito eran 20 años de privación de libertad o la muerte. Sin embargo, en la formulación propuesta en el anteproyecto, las sanciones máximas posibles para el sabotaje se extienden de 20 a 30 años de privación de libertad e incluyen la privación perpetua de libertad y la pena de muerte”, explica. 

Recomendado para ti