‘Tenemos un nivel de deuda que la economía no genera la capacidad para enfrentar’, reconoció el ministro de Economía y Planificación de Cuba, Alejandro Gil, en una entrevista publicada esta semana por la agencia francesa de noticias AFP.

Pero el impago "no se nos ha ido de las manos", añadió luego, contradiciéndose de esa manera.

Por otro lado, el titular culpó al clima, a la baja fuente de acceso a financiamientos competitivos y a "nuestros propios problemas" de la creciente deuda, así como al "bajo desarrollo productivo".

"Tengan seguridad que reconocemos nuestros compromisos", añadió, aparentemente, a los principales socios comerciales de la Isla.

“En diciembre de 2015, el Gobierno cubano renegoció su deuda con el Club de París y empezó a pagar un cuarto de los 2.600 millones de dólares que debía a los 14 países del grupo, aunque el principal negociador de los impagos, Ricardo Cabrisas Ruiz, dijo que todos los desembolsos posiblemente se realizarían "con retraso", dijo Diario de Cuba.

Ahora

"estamos conciliados y el cronograma de pagos se ha venido cumpliendo", aseveró.

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