Este jueves 19 de diciembre, un grupo de 42 migrantes irregulares, compuesto por 29 hombres y 13 mujeres, fue devuelto a Cuba en un vuelo procedente de Estados Unidos que aterrizó en el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana.

Según fuentes oficiales, la mayoría de las personas repatriadas son originarias de la capital cubana. Además, dos de los migrantes fueron trasladados al órgano de investigación correspondiente, al ser señalados como presuntos autores de hechos delictivos cometidos antes de salir del país.

Con esta operación, el número de devoluciones realizadas hacia Cuba desde distintos países de la región en lo que va del 2024 asciende a 91, acumulando un total de 1,354 personas retornadas.

Las autoridades cubanas han señalado que estos procedimientos forman parte de los acuerdos de cooperación migratoria vigentes entre Cuba y otros países. Estos acuerdos buscan garantizar un flujo migratorio regular, ordenado y seguro, y desalentar las salidas ilegales, que suelen ser peligrosas y explotadas por redes de tráfico humano.

A pesar de estas medidas, la emigración irregular sigue siendo un desafío para las autoridades cubanas, con numerosos ciudadanos intentando abandonar el país debido a la actual crisis económica y social que atraviesa la isla. La repatriación de migrantes forma parte de los esfuerzos regionales por abordar las causas y consecuencias de este fenómeno.

No se ofrecieron más detalles sobre el destino de los migrantes devueltos ni las condiciones en las que serán reintegrados al país.

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